Universidad de Chile abrió los fuegos y punto a un jugador soñado: Eduardo Vargas, atacante emblemático del cuadro laico. La dirigencia azul informó al entorno del delantero su interés en repatriarlo para la temporada 2025. La directiva del club, Azul Azul, inició los primeros acercamientos con la empresa representante del jugador, actualmente en el Atlético Mineiro de Brasil. Según trascendidos de Cooperativa Deportes, el equipo chileno se prepara para discutir las condiciones que permitirían al goleador chileno vestir nuevamente la camiseta del chuncho.
Este regreso, sin embargo, no será sencillo, ya que el factor económico se perfila como uno de los mayores desafíos. Vargas, de 34 años, cuenta con una alta remuneración en el equipo brasileño, y aunque el Atlético Mineiro estaría dispuesto a dejarlo partir, su salario podría ser un obstáculo para las arcas de la Universidad de Chile. Por ello, el club espera que Vargas esté dispuesto a realizar un esfuerzo económico que facilite su llegada.
El factor familiar también juega
Aparte de las negociaciones económicas, Eduardo Vargas debe considerar el impacto de esta posible mudanza en su vida personal, especialmente la opinión de su esposa, Juliana Peixoto, quien es una conocida influencer brasileña. Este factor familiar será decisivo en la decisión del delantero, quien deberá evaluar tanto su carrera profesional como el bienestar de su familia.
La U de Chile mantiene viva la esperanza de que Vargas haga un esfuerzo, recordando los triunfos pasados que compartieron, como la histórica Copa Sudamericana de 2011. Si el acuerdo llega a buen puerto, Vargas podría ser un refuerzo clave para un equipo en busca de nuevos éxitos nacionales e internacionales.