Alexis Sánchez sigue esperando la oportunidad de regresar a las canchas con el Udinese. Después de una larga ausencia de aproximadamente seis meses, el "Niño Maravilla" está ansioso por retomar su carrera, pero parece que deberá armarse de paciencia una vez más.
El resentimiento de no poder jugar se ha vuelto evidente en el jugador de 35 años, quien regresó a Udinese, donde es ídolo, pero aún no ha podido ser convocado para disputar siquiera un partido. A pesar de que en Italia se barajaba la posibilidad de que Sánchez pudiera volver a jugar antes de fin de año, las decisiones del cuerpo técnico cambian esta perspectiva.
Precauciones del técnico
El entrenador del Udinese, Kosta Runjaić, no está completamente convencido sobre el estado físico del delantero chileno. Según el medio italiano Messaggero Veneto, el cuerpo técnico está adoptando una postura cautelosa respecto al regreso de su estrella. Esta cautela proviene del deseo de evitar posibles lesiones o sobrecargas que podrían afectar el rendimiento a largo plazo de Sánchez.
En sus declaraciones, el mencionado medio destaca que: "Está el staff de Kosta Runjaić con guantes en las manos, usados no tanto por el frío, sino para poder manejar mejor la clásica patata caliente". Este enfoque indica que el entrenador está lidiando con la presión de la situación, al mismo tiempo que intenta evitar decisiones precipitadas.
El rendimiento del futbolista ha sido claramente alentado por su deseo de regresar, lo que ha llevado a que Sánchez esté "convencido de acelerar su regreso programado para enero". Sin embargo, el cuerpo técnico cree que aún no está listo para participar plenamente en los entrenamientos. En consecuencia, el chileno no participó en los ejercicios tácticos dirigidos hacia el próximo partido contra el Nápoles.