Boca Juniors enfrenta una situación complicada con el chileno Carlos Palacios, quien está en la mira del cuerpo técnico por su reciente faltazo a un entrenamiento. La situación se vuelve más crítica al recordar que el entrenador Fernando Gago no tolerará esta inconducta, así como lo hizo anteriormente con Edinson Cavani, capitán del equipo. La decisión de Gago podría tener consecuencias significativas para el futuro inmediato de Palacios en el club.
Un faltazo que genera repercusiones
Palacios no se presentó al entrenamiento del lunes pasado, alegando haber perdido un vuelo matutino que le impidió llegar a tiempo. Sin embargo, en el predio de Ezeiza, las explicaciones del jugador no fueron suficientes para convencer a Gago, que mantiene un historial de ser estricto con las reglas de comportamiento. Los rumores indican que el entrenador aplicará un castigo ejemplar, similar al que recibió Cavani en noviembre, cuando fue excluido de un partido por llegar tarde a una charla técnica.
"Si pasó con Edi, va a ocurrir con él también", afirmaron fuentes cercanas al club, sugiriendo que Palacios no tendrá un trato preferencial. La infracción cometida por el chileno al faltar sin justificación a un entrenamiento es considerada más grave, lo que aumenta las probabilidades de que reciba una sanción.
El hecho de que Palacios haya sido visto en una fiesta en Santiago, junto a su compañero Ayrton Costa, hace que su situación sea aún más delicada. Mientras Palacios faltó al entrenamiento, Costa se presentó, lo que refuerza la percepción de que la conducta del chileno no fue adecuada.

Posibles sanciones y su impacto
La decisión de Gago podría incluir la exclusión de Palacios del partido del domingo contra Newell's. Esta medida sería un castigo significativo, ya que el chileno ha sido un jugador clave para el DT en esta temporada. Su ausencia en el once titular obligaría a Gago a buscar un reemplazo, con opciones como Alan Velasco, quien se recupera de una lesión, o el Changuito Zeballos, que también se perfila como candidato.
La situación no solo afecta al jugador, sino que también ha generado malestar en la directiva. Juan Román Riquelme, presidente del club, se mostró decepcionado por el comportamiento de Palacios. Riquelme había trabajado arduamente para que el chileno se uniera a Boca y le había brindado su apoyo desde su llegada. La falta de compromiso del jugador ha causado preocupación en la cúpula del club.