Ricardo Gareca, técnico de la Selección Chilena, se encuentra ultimando detalles para el crucial partido contra Brasil, que se llevará a cabo en el estadio Nacional. Con la hinchada apoyando desde las gradas, el equipo necesita urgentemente obtener puntos en las Eliminatorias para el Mundial de 2026, donde las posibilidades de clasificación son cada vez más difusas. Actualmente, Chile ocupa el penúltimo lugar en la tabla, lo que agrega presión a la selección nacional.
Una formación inédita para enfrentar a Brasil
En las últimas prácticas, Gareca ha mostrado su intención de renovar la plantilla y ajustar la estrategia del equipo. La incorporación del zaguero Thomas Galdames, quien juega en el Krylia Sovetov de Rusia, ha sido una de las últimas novedades, sumándose a un grupo que busca mejorar su desempeño. El entrenador ha enfatizado la importancia de la intensidad y la precisión en el juego, entendiendo que estos son factores clave para competir contra un rival de la talla de Brasil, que históricamente ha demostrado ser un adversario formidable.
La primera alineación que ha presentado Gareca incluye a jóvenes talentos, como Fabián Hormazábal y Marcelo Morales, ambos de Universidad de Chile, encargados de cubrir las franjas en una línea defensiva de cuatro hombres. Junto a ellos, Matías Zaldivia y Guillermo Maripán completan la defensa. Maripán, cuyo liderazgo ha sido destacado, es el candidato ideal para llevar la jineta del equipo.
En el mediocampo, Gareca busca una combinación de dinámica y buen manejo del balón. Para ello, ha optado por Felipe Loyola y Rodrigo Echeverría, quienes se desempeñan en Argentina con Independiente y Huracán, respectivamente. La estrategia radica en recuperar la posesión rápidamente y controlar el juego ante un Brasil que es conocido por su capacidad de mantener la pelota y desbordar a sus oponentes.
Un ataque que busca sorprender
En la delantera, Gareca vuelve a confiar en los extremos Darío Osorio y Víctor Dávila, quienes aportarán velocidad y desborde. Diego Valdés tendrá un rol fundamental, parándose detrás de Eduardo Vargas, el único delantero nominal en la formación. La idea general es aprovechar las bandas para generar oportunidades de gol y, al mismo tiempo, contener los ataques del pentacampeón del mundo.