El régimen de Nicolás Maduro cerró la frontera entre Venezuela y Colombia, una medida que se anunció en el marco de la juramentación presidencial del 10 de enero. La decisión, comunicada por Freddy Bernal, gobernador del estado Táchira, se justificó con la alegación de una supuesta "conspiración internacional" contra la paz de los venezolanos. Este cierre, según Bernal, se mantendrá hasta el próximo lunes 13 de enero.
"Tenemos la información de una conspiración internacional para perturbar la paz de los venezolanos", declaró Bernal. La medida tendrá un impacto significativo en la economía local, afectando a ganaderos, empresarios y ciudadanos que dependen del cruce fronterizo para sus actividades diarias.
Suspensión de vuelos y clima de tensión
Además del cierre de la frontera, la dictadura chavista suspendió todos los vuelos entre Colombia y Venezuela desde el viernes 10 hasta el lunes 13 de enero. Este contexto se da en uno de los momentos más críticos para Venezuela, ya que Nicolás Maduro intenta asumir un tercer mandato, considerado ilegítimo por gran parte de la comunidad internacional. Edmundo González Urrutia, reconocido como presidente electo por muchos países, planea regresar al país tras su gira por América, buscando asumir formalmente el liderazgo del Ejecutivo.
Durante seis meses, la comunidad internacional, especialmente el Gobierno colombiano, solicitó al régimen de Maduro la presentación de las actas electorales que respalden su victoria en los comicios del 28 de julio. Ante la falta de pruebas, la juramentación de Maduro se percibe como una reafirmación de un proceso electoral manipulado. El régimen alegó un "hackeo masivo" a los servidores del Consejo Nacional Electoral (CNE) proveniente de Macedonia del Norte como excusa para su legitimación.
En los días previos a la toma de posesión, el régimen venezolano intensificó la represión, desapareciendo a un grupo notable de activistas de derechos humanos y políticos. Destaca el caso de María Corina Machado, una líder de la oposición que fue secuestrada violentamente por las fuerzas del régimen y luego liberada tras varias horas de incertidumbre.
El acto de juramentación de Maduro está programado para el mediodía (16H00 GMT) en el Parlamento, un evento que se realiza en un ambiente de intensa tensión política y social.
Reacciones del Gobierno colombiano
Ante estas circunstancias, el Gobierno colombiano, a través de la Cancillería, expresó su preocupación por las violaciones de derechos humanos en Venezuela, especialmente tras el secuestro de María Corina Machado. En un comunicado, el Gobierno colombiano hizo un llamado a Maduro para que se respeten los derechos fundamentales de los ciudadanos y la oposición política en el país vecino.
"El Gobierno de Colombia expresa su profunda preocupación y rechazo ante el incremento y la gravedad de las denuncias de violaciones a los Derechos Humanos que están teniendo lugar en Venezuela en la antesala al próximo 10 de enero", afirmó la Cancillería. Este pronunciamiento se basa en informes recientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, que documentan estas violaciones.
Petro no va
Asimismo, el Gobierno colombiano reiteró su llamado a las autoridades venezolanas para que se respeten integralmente los derechos de los opositores, mencionando casos de detenciones como los de Carlos Correa y Enrique Márquez, junto con el acoso sistemático a líderes de la oposición.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, anunció que no asistirá a la investidura presidencial de Maduro, argumentando que no se puede hablar de una elección libre en el proceso electoral realizado en julio. La decisión de cerrar la frontera ocurre en un contexto de tensiones persistentes entre ambos países, marcadas por acusaciones mutuas y recientes denuncias sobre actividades delictivas en la zona limítrofe. Bernal mencionó que el estado Táchira ha sido "asediado durante años por bandas paramilitares colombianas", lo que influye directamente en las decisiones del régimen de Maduro.